domingo, 4 de febrero de 2007

Alemania ya tiene su Mundial





COLONIA | MADRID.- Alemania consiguió su primer título mundial desde la reunificación del país y cumplió las expectativas de los 19.000 hinchas del KölnArena, un delirio colectivo que acabó con las aspiraciones de Polonia (29-24). Tras la lesión de Fritz en el segundo tiempo, la aparición del portero suplente Bitter fue clave en la victoria local.

La selección de Bogdan Wenta notó la presión del momento y sus lanzadores (Bielecki, Tkaczyk y Marcin Lijewski) no tuvieron una buena tarde (nueve goles entre los tres.




La falta de precisión en los lanzamientos propició los contragolpes locales y una rápida ventaja (8-3). Pero las carencias en estático de los de Heiner Brand, tan sólo maquilladas por la fintas y penetraciones de Kraus y Zeitz, permitieron un respiro a Polonia, donde brillaron Bartosz Jurecki y del portero Slawomir Szmal.

A tan sólo dos goles (13-11) se llegó a situar el cuadro eslavo a menos de cinco minutos para la conclusión de la primera mitad, una desventaja que se dobló al descanso (17-13).

El destino, sin embargo, deparaba una nueva sorpresa, la inoportuna lesión de Fritz, pareció paralizar al cuadro teutón, que permitió una nueva remontada polaca, esta vez de la mano de extremo derecho Mariusz Jurasik, que situaron a los eslavos a un único gol (22-21), con 15 minutos por delante.

El propio Jurasik tuvo la oportunidad de llevar la igualdad al tanteador apenas unos segundos más tarde, pero el jugador del Kronau alemán estrelló el balón en el palo izquierdo de la portería defendida por Bitter, que suplió al lesionado Fritz.

Un falló que significaría el principio del fin para Polonia, pues entonces surgió la figura de un hasta entonces muy desdibujado Pascal Hens para acabar con dos potentes latigazos todos los miedos del conjunto alemán.

FICHA TÉCNICA
Final del Mundial de balonmano
Pabellón: KölnArena de Colonia. 18.500 espectadores
Árbitros: Bord y Buy (Francia). Excluyeron por dos minutos a Kaufmann por Alemania; y a Wleklak, Krzysztof Lijewski y Kuptel, por Polonia.
Parciales: 2-2, 6-3, 10-6, 12-8, 13-10, 20-14, 21-16, 22-21, 24-22, 27-13 y 29-24
ALEMANIA 29
Fritz; Kehrmann (4), Zeitz (3), Klimovets (1), Roggisch (-), Jansen (8, 1p) y Kraus (4) -equipo inicial- Bitter (ps), Hens (6), Klein (-), Glandorf (2), Baur (-), Kaufmann (-) y Schwarzer (1).
POLONIA 24
Szmal; Jurasik (5), Marcin Lijewski (1), Tkaczyk (5), Bielecki (3), Jachlewski (1) y Bartosz Jurecki (2) -equipo inicial- Weiner (ps), Krzysztof Lijewski (1), Siodmiak (1), Wleklak (1), Michal Jurecki (1), Kuptel (1) y Tluczynski (2p).
 

Dinamarca conquistó el bronce al meterle velocidad y llevarse a Francia por delante


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CUARENTA AÑOS DESPUÉS, LOS NÓRDICOS SUBEN AL PODIO MUNDIALISTA


EFE. Colonia (Alemania) Dinamarca ha vuelto a subir, cuarenta años después de lograr la medalla de plata en Suecia'67, al podio mundialista, tras adjudicarse el bronce en el Campeonato del Mundo de Alemania gracias a su cómoda victoria por 27-34 ante Francia, en un choque en el que los nórdicos, a la carrera, dejaron sentenciado el triunfo mediada la primera mitad. El conjunto francés, a diferencia de lo ocurrido en los cuartos ante Croacia y en semifinales con Alemania, fue incapaz de arrastrar al cuadro danés al lento ritmo del que precisa el equipo galo, dado el escaso número de jugadores que utiliza el técnico Claude Onesta.


De este modo, Francia, que buscaba su tercer bronce consecutivo tras los conquistados en Portugal 2003 y Túnez 2005, ya llevaba encajados a los veintitrés minutos de juego los mismos goles, dieciocho, que concedió en todo el encuentro de cuartos de final ante los croatas. Un dato que refleja, curiosamente, los numerosos problemas del conjunto francés para superar el entramado defensivo nórdico, que no desaprovechó ni un sólo error del 'siete' galo para exhibir su fulgurante juego de contragolpe tanto en primera como en segunda oleada.

Con los laterales Daniel Narcisse y Jerome Fernández con el punto de mira mal calibrado y con un Nikola Karabatic, desaparecido en el primer tiempo, el ataque francés de debió encomendar al acierto de sus segundas líneas. Pero entonces apareció el portero danés Kasper Hvidt que desbarató con sus intervenciones los disparos francos de Abalo para alimentar, todavía más si cabe, la maquinaria del contragolpe nórdico, con el extremo Lars Christiansen como auténtico estilete.

Contraataques y rápidas transiciones que permitieron a los daneses dejar casi sentenciada la medalla de bronce antes de llegar al ecuador de la primer tiempo, gracias a los siete goles de ventaja (4-11) de los que gozaban los de Ulrik Wilbek. Una renta, que pese a los intentos de los franceses, Onesta probó con la presencia de un doble pivote en ataque, apenas menguaría en la primera mitad, que concluyó con un contundente 15-21 para los daneses.

Amago de reacción solucionado en defensa

El resurgir de Nikola Karabatic, coincidiendo con las exclusiones casi consecutivas de Lars Jorgensen y Michael Knudsen, permitieron a Francia soñar con la remontada en el arranque del segundo período, en el que Dinamarca vio como su ventaja se reducía a tan sólo tres goles (21-24).

Momentos de tensión que los nórdico solventaron con una nueva vuelta de tuerca en defensa, una parada de Hvidt y un bloqueo de Jorgensen, que volvió a situar a los daneses con una cómoda renta entorno a los cinco goles o seis goles (22-28), que hizo ya inútil el postrero intento de Francia, con una defensa muy abierta, de reconducir el tanteador.

Un marcador final (27-34), que confirma a Dinamarca como una auténtica especialista en esta clase de encuentros, tal y como atestiguan los tres bronces consecutivos logrados en los Europeos de Suecia 2002, Eslovenia 2004 y Suiza 2006, al que añadir el logrado hoy en Alemania, pero que todavía debe demostrar si tiene el carácter ganador necesario para ganar de una vez por todas una semifinal.

                                             

Ficha técnica

27 - Francia: Omeyer; Abalo (1), Abati (1), Dinart (-), Bertrand Gille  (2), Karabatic (5) y Guigou (6, 3p) -equipo inicial-  Ploquin (ps),  Fernández (6), Burdet (-), Guillaume Gille (-), Narcisse (5,1p),  Girault (-) y Kempe (1).
34 - Dinamarca: Hvidt; Stryger (3), Leegaard (5), Boldsen (2), Madsen  (3), Christiansen (9, 4p) y Knudsen (4) -equipo inicial- Henriksen  (ps), Jorgensen (1), Jensen (1), Rasmussen (-), Oechsler (2), Noddesbo  (4) y Lindberg (-).

Marcador cada cinco minutos: 2-4, 4-7, 6-11, 9-15, 14-18, 15-21 (descanso) 16-22, 18-24, 21-25, 22-28, 26-30 y 27-34 (final)

Árbitros: Kristic y Ljubic (Eslovenia). Excluyeron por dos minutos a  Karabatic y Abalo por Francia; y a Jensen, Jorgensen, Knudsen y  Noddesbo por Dinamarca.
Incidencias: Encuentro por el tercer y cuarto puesto del Campeonato del  Mundo de Alemania 2007 disputado en el Kolnarena de Colonia ante unos  18.500 espectadores.
 

Pastor: "España nunca ha llegado a rendir a su nivel"



El seleccionador nacional de balonmano, Juan Carlos Pastor, no trató de ocultar su malestar por el rendimiento del equipo español en el Mundial de Alemania, donde como reconoció Pastor, por "unas razones u otras, la selección española nunca ha llegado a rendir a su nivel. Por unas razones o por otras, éste nos ha sido nuestro campeonato, hemos logrado el objetivo mínimo que era lograr la clasificación para el preolímpico, no podemos estar contentos ni con el resultado, ni con el juego, ni con el nivel exhibido, tan sólo puedo estar satisfecho por la unidad que siempre ha mostrado el equipo, en eso sí que me voy contento", señaló Pastor.

El seleccionador reconoce que no está contento con el juego en este Mundial

En este sentido, el preparador español no dudó en señalar la falta de solidez defensiva como la principal causa del irregular rendimiento de la selección en un Campeonato del Mundo, en el que España partía como un claro favorito para revalidar el título conquistado hace dos años en Túnez. "Defensivamente no hemos dado la misma medida que en otros años, y cuando la defensa no va bien, comienza a surgir falta de confianza en el de al lado y el sistema defensiva falla entonces más todavía", afirmó Pastor. A este respecto, el seleccionador nacional no dudó en señalar como una de las posibles causas de este bajón defensivo, el escaso protagonismo en defensa los jugadores españoles dentro de la Liga ASOBAL.

"Cuántos jugadores españoles actúan en sus clubes en defensa en los momentos difíciles, en los momentos de la verdad, yo lo tengo claro... así que aquí tienen que defender jugadores que en sus clubes sólo suelen atacar, porque sino tendría que hacer siete cambios ataque defensa", explicó el técnico. Asimismo, Juan Carlos Pastor, se mostró crítico por la labor arbitral, más que por el polémico arbitraje sufrido en los cuartos de final ante Alemania, por la excesiva violencia con la que han dejado ejercer los colegiados a las defensas en el presente campeonato,

"Tras el Europeo de Eslovenia en 2004 se decidió que cualquier 'agarrón', golpe en el cuello eran dos minutos, y en Túnez sucedió así, cada acción de este tipo era una exclusión, pero aquí -en Alemania- parece que todo vale, pero entonces que nos lo digan, para saber que balonmano hay que hacer", comentó el entrenador. Un cambio de concepción arbitral que perjudica especialmente al equipo español, líder del juego limpio en el presente Mundial, y con un sistema defensivo basado esencialmente en el "amagar y no dar" con el fin de evitar las exclusiones.

"Nosotros no hemos estado bien, es verdad, pero si defender es pegar, que nos lo digan y pegamos todos", indicó Pastor, que también achacó a esta mayor permisividad arbitral algunos de los problemas en ataque del equipo español. "Nosotros quizá no tengamos lanzamiento exterior y por eso tenemos que buscar otras opciones, pero tampoco tenemos la culpa de tener un excelente pivote y facilidad para jugar con él, y ahí ese arbitraje se ha notado", comentó Pastor.

No obstante, el seleccionador nacional no dudó en señalar como clave para valorar la participación del equipo español en el presente Mundial el encuentro de cuartos de final en el que España cayó por (25-27) ante el anfitrión, Alemania, tras un polémico arbitraje. "Ese día parece que para haber pasado a semifinales tendríamos que haber ganado de forma clara, no lo hicimos, a diferencia de en Túnez que hicimos nuestro mejor partido ante Noruega en lo que podrían equiparase a los cuartos de aquí, esta vez siempre fuimos a a remolque y luego nos pasó lo que nos pasó, caímos en cuartos, y nos tocó pelear por esta posiciones", concluyó Pastor.